Un nuevo escándalo de corrupción en Colombia se
destapó ayer lunes 2 de mayo. El propio presidente Juan Manuel Santos, en rueda
de prensa desde la Casa de Nariño y acompañado por la fiscal general, Viviane
Morales; la contralora, Sandra Morelli; y una delegada de la Procuraduría,
reveló cómo en el sector de la salud hay “una verdadera mafia estaba robando
los recursos de los colombianos”.
Pagos indebidos, trámites ilegales, pagos de
tutelas falsas, cobros de facturas de medicamentos con valor superior a los del
mercado, recobro de cuentas con cédulas de personas fallecidas o cédulas falsas
son algunas de las irregularidades halladas. Según explicó el Presidente, se
presentan irregularidades en diez modalidades de recobro que las EPS realizan
al Fondo de Solidaridad y Garantía (Fosyga) por medicamentos y prestación del
servicio de salud a los afiliados. En una sola de las actividades ilegales
encontradas, y con una muestra de sólo del 10 por ciento, se ha descubierto un
desfalco por cerca de 30.000 millones de pesos, el 90% restante podría arrojar
la suma de 4.5 billones.
El sector salud recibe recursos equivalentes a casi
el 6 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), es decir cerca de 28 billones
de pesos anuales, dineros que se supone deben sostener todo el sistema que
incluye entre otros la red hospitalaria.
Y pensar que a esta hora miles de personas hacen
interminables colas para reclamar una atención medica general o especializada o
medicamentos que van desde acetaminofén que a veces se niega hasta algunas de
alto costo.
